FELIÇ 2011

Hace cuatro días que me despido del año.

Estoy en casa, limpiando como una loca, hace un rato he leído el blog de mi Silvia que me hace reír y reconocerme (http://bridgetcondosjones.blogspot.com). Hace un rato decidí que hoy me pasaba el día ordenando un año, tirando las cosas que ya sobraban, recordando las cosas que me he quedado y que me resultan necesarias. Un año me ha dado para desenamorarme y enamorarme. Me ha dado para montar el Atelier. Para conocer a un montón de gente y prescindir de otra.

Y yo que voy a ritmo submarino, yo que desmonto paisajes en mi cabeza y los convierto en conversaciones continuas. Yo que soy amante de amar y abrazar, me encuentro escoba en mano y bolsa industrial de cosas viejas.

Los miro a mis chicos. Al grande que me toma el pelo y casi puedo ser yo hace poco. Con él nos hemos sentado a hacer bons propósits, como aquello que hacía Joan Barril en el Café de la República. El pequeño que va vestido de cocinero y disfruta de los palazos que le dio al pobre tió con una cocinita punterísima con horno y lavadora que he montado yo misma de resaca con mi amiga Manu. Nos bautizaron ayer como "las burbujas freixenet". Cenamos en La Mar Salada y reímos con un loco que me confundió con China Blue en el Milano bajo la mirada con gafas perfectas de nuestro Juanjo y la risa de la Moreneta. Salvamos a un pobre chico que lo pateaban en medio de Plaza Urquinaona. Caminamos bajo la lluvia pensando qué iba a ser de nosotras en el 2011. Porque ayer celebramos nuestro fin de año, ayer zanjábamos una parte y dejábamos para hoy los niños y la familia biológica, que me encanta también...

Y la excusa para contar todo esto es esta foto.

Mi Manu con su tocado.

Así que a la vuelta al cole volveré con los catálogos y el trabajo serio, sin contar tanta mandanga sentimental, que se ve que estas fechas me reclaman por dentro.

De verdad, quiéranse. Abrazaros mucho y sonreid